Por Fernando Lardizábal
Delegado Episcopal para la Pastoral Penitenciaria
La justicia es dar al otro lo que es suyo, lo que le corresponde; la caridad es dar al otro lo que es mío, dar de lo que me corresponde.
Justicia: "Dar al otro lo que es suyo". Esto significa que cada ser humano pueda acceder mínimamente a lo que le corresponde para desarrollarse como persona, creada a imagen y semejanza de Dios.
Caridad: "Dar al otro lo que es mío", lo que nadie me obliga, pero mi conciencia ante el dolor injusto me pide... Uno no está obligado por leyes a la caridad; es la conciencia de la común hermandad en humanidad la que me abre ese horizonte. De ahí que la caridad, ante lainjusticia humana, elige amar más de lo obligado por la ley; ama más de lo que marca el estrecho límite humano; un amor que excede a la justicia, sin negarla. En el fondo, la caridad está exigida por la justicia faltante en la vida del otro, y animada por el Amor de un Dios que nos amó hasta entregar a su Hijo por nosotros.
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